Antes de empezar a
escribir quiero que sepas que esta carta se la dedico a la persona más especial
de mi vida, al ángel dulce, tierno y maravilloso que Dios me ha prestado; son mis
sentimientos expresados en estas líneas para una gran mujer que me ha regalado la vida. Estas palabras son para ti: Madre
mía.
Te fuiste de mi lado.
En silencio
fue tu partida.
Mi corazón se ha desgarrado
por tan súbita despedida.
Tu espíritu luchador
a la vida se aferraba.
Más Dios, desesperado,
a su lado te llamaba.
En ángel te has convertido.
Velando por nosotros estás.
Aguardando que se cumpla la cita
de reunirnos en la eternidad.
Sin embargo, me parece tan lejos...
Quisiera ahora poderte abrazar.
Te busco, te llamo. No te encuentro.
Dime... ¿Cómo me he de consolar?
Tu amor incalculable
mis faltas por alto pasó.
Porque el querer de una madre,
ese, no tiene comparación.
Junto a mi padre,
tu bien amado esposo
ahora ya estás.
Y no os separaréis jamás.
Sé que en el cielo habitas.
Al lado de Dios has de estar.
Aguardaré paciente el día
en que nos volvamos a encontrar.
Entonces será para siempre.
Nada ni nadie nos podrá separar.
No temeré cuando llegue mi momento
pues tu presencia me confortará.
Me esforzaré por ganar el cielo
para no perderte nunca más.
Mientras tanto, guía mis pasos.
Ilumina mi senda, enséñame el camino.
Que tu presencia me rodee siempre
hasta que se cumpla mi destino.
Este taller nos enseña a ser conscientes de nuestra respiración, nos damos cuenta, SENTIMOS cómo respiramos.
Según el estado emocional, si estamos estresados, nerviosos, enfadados, deprimidos…, respiramos, sin darnos cuenta, de manera agitada, entrecortada, por lo que al no entrar el aire necesario, no se oxigena adecuadamente nuestro cuerpo y se acrecienta el malestar general.
Al inspirar tomamos de aquello que nos rodea y al espirar devolvemos lo que hay dentro de nosotros. La respiración, por lo tanto, establece la conexión entre nosotros y nuestro entorno. Respirar es dar y tomar; es un intercambio entre el interior y el exterior, indispensable para la vida. Cuando esta relación se ve alterada, surge en el hombre un estado de desequilibrio.
Aprendiendo a respirar podemos alcanzar una conciencia de unidad viva entre el cuerpo, el espíritu y el alma, aporta mayor flexibilidad al cuerpo, aviva nuestra mente, equilibra nuestro espíritu, aumenta el rendimiento del hemisferio derecho nuestro cerebro, que es el responsable de la creatividad, de la belleza, el arte, la inspiración, es donde se encuentra la parte femenina del ser humano.
Pero el poder de la respiración va todavía más lejos: una respiración adecuada es útil no sólo para mantener sano el cuerpo entero sino también para sanar o aliviar problemas físicos y psíquicos.
Si quieres mejorar tu calidad de vida con unos ejercicios de respiración fáciles,sencillos y prácticos, que te ayudarán a relajarte y a tener mayor vitalidad y movilidad.
Anímate, inscríbete en este taller.
DESARROLLO
- Duración del taller: 3 horas
- Ejercicios de respiración, relajación y meditación
- Material didáctico incluido
TRAER:
- Ropa cómoda
- libreta y bolígrafo
- cojín o zafu
- esterilla y manta
